No debe ser fácil decidir, en este mundo, tener hij@s... pero aún existen personas valientes, que optan por compartir su vida y su amor, con esas pequeñas personitas que te enseñan a ver y sentir tu existencia con imaginación y locura... sentimiento que los adultos solemos enterrar en el baúl de los recuerdos...
Hace un par de meses Mónica arropó entre sus brazos a Noela, y este abrazo durará el resto de sus vidas... ayer tuve el gran placer de conocer a la enana... y pude comprobar la facilidad y flexibilidad de las pequeñas mentes para adaptarse al presente, encontrar su lugar en el mundo y aferrarse al amor...
Mañanita de charlas, risas, escaleras, disfraces, abrazos, lápices, fotos, besos, sentimientos, paseos, y piel... mucha piel...
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1 comentario:
Veo que ya puedo comentar, así que ahí va: Me encanta esta foto. Qué lindas!!!
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